La ciudad de Hamburgo nació junto a su puerto, el cual con el paso de los años se ha convertido en el más grande de alemania y uno de los más agitados del mundo. En hamburgo se respira ese espíritu portuario, ya sea por los grandes barcos que se pasean sin cesar por las aguas del río Elba o por todas las tiendas y comercios especializados en temas marinos de la ciudad. El puerto de hamburgo es realmente inmenso y si quieres recorrerlo todo te recomendamos que subas a bordo de alguno de los barcos que lo recorren de punta a punta, donde además podrás aprender más sobre su historia y como fue forjando a esta ciudad.
Cuando no existían los modernos contenedores de metal que todos conocemos actualmente, toda la carga que pasaba por este importante puerto tenía que ser cargada y descargada manualmente de estas bodegas, antes de viajar a los rincones más alejados del planeta. Hoy en día los viejos almacenes de productos se reconvirtieron en modernas oficinas y viviendas de lujo, ademas de algun que otro museo que siempre vale la pena visitar. Cuando pases por estos gigantes edificios de ladrillo podrás ver que todavía existen algunas tiendas resisten el paso del tiempo y siguen funcionando dentro de ellos.
Inaugurada en 2017, en poco tiempo este moderno edificio dedicado a las artes se convierten en todo un símbolo de la nueva Hamburgo. En su interior una gran sala de conciertos, permite que unas 2100 personas puedan escuchar las mejores melodías con una calidad de sonido excepcional, la cual es considerada por muchos como una de las mejores del mundo. Si tienes suerte y tu visita a la ciudad coincide con uno de los espectáculos no dudes en conseguir una entrada, sino también tendrás la opción de visitar el interior del edificio y su magnífica terraza en uno de recorridos guiados por la filarmónica.
Como toda ciudad portuaria, repleta de marineros, Hamburgo también tiene su barrio rojo. Sankt Pauli es una zona repleta de bares, discotecas, club de striptis y porsupuestos cabaret. Incluso aquí existe una pequeña calle donde podrás encontrar sus famosas “vidrieras”, un lugar al mejor estilo Amsterdam, donde las mujeres que ejercen las prostitutas se exhiben para sus clientes. Sankt Pauli es un barrio donde reina la libertad, aquí los negocios de sexshop conviven sin problemas con iglesias y estaciones de policía. Este fue el barrio que vio creer a los Beatles, los cuales pasaron varias temporadas tocando en sus bares y hoy son recordados en una céntrica plaza.
Este museo de diez plantas dedicado al apasionante mundo de la navegación es uno de los más grandes del mundo en su tipo. Aquí se exponen maquetas y modelos de barcos de todas las épocas, además de pinturas y objetos náuticos, que ofrecen una interesante mirada del mundo de los océanos y su conquista a bordo de navíos. Un museo ideal para toda la familia, donde además de aprender, podremos divertirnos a bordo de su simulador de tormentas, el cual pone a prueba hasta a los marineros más expertos!
En el interior de uno de los antiguos depósitos del puerto de Hamburgo se esconde un verdadero mundo en miniatura, en el cual unos 11.000 metros de vía en escala H0 (1:87), nos invitan a viajar por representaciones de Alemania Meridional (Harz, Alpes y Knuffingen), Hamburgo y la costa, Estados Unidos, Escandinavia, Suiza e Italia, además de un gran aeropuerto internacional y todo esto bajo un solo techo! Miniatur-Wunderland fascina tanto a niños como a grandes, gracias a estos mundos repletos de color y situaciones de lo más hilarantes. Si alguna vez soñaste con tener una maqueta de trenes o algo parecido, este lugar realmente te volará la cabeza!